La calefacción proporcionada por nuestros paneles utiliza el principio de la calefacción radiante. De allí deriva una extensa lista de ventajas respecto a un sistema convencional de calefacción por convección:
- La superficie de los paneles genera un flujo de calor infrarrojo de longitud de onda que no supera los 5 micrómetros, siendo así en su mayor parte absorbida por el cuerpo humano y los objetos de la habitación.
- Cuando el flujo térmico aumenta la temperatura de los objetos de la habitación hasta 20-22ºC, se alcanza un confort térmico con una temperatura de aire de 18-19ºC, consiguiendo así un ahorro energético de por lo menos 20% respecto a un sistema por convección de aire.
- La distribución vertical de temperatura es más homogénea con una diferencia máxima de 2ºC, mientras un sistema de convección puede generar una diferencia de hasta 6ºC (1ºC por cada 30-50 cm de altura). Esto permite reducir la circulación de aire y de las partículas de polvo.
CALEFACCIÓN PANEL RADIANTE
CALEFACCIÓN POR CONVECCIÓN
La calefacción radiante presenta también otras ventajas muy interesantes:
- Como el vidrio no es transparente a este tipo de radiación, limita las perdidas térmicas por las cristaleras y las ventanas.
- Las paredes se calientan antes que el aire y evitan así la formación de condensación superficial que acaba dañando las paredes, sin reducir la humedad relativa del aire en la estancia.
Además, los paneles radiantes permiten realizar calefacción por zonas en estancias grandes o con altos techos. En este tipo de espacio con un volumen de aire muy grande, resulta ser el único modo viable, confortable y económico de calefacción, haciendo del sistema de placas un sistema ideal para el sector terciario e industrial.
Si está buscando un convector eléctrico de bajo consumo, nuestro sistema de calefacción radiante es exactamente lo que necesita.
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